El día más triste del año
Termina la Navidad. Se acaban las vacaciones. Hace frío. Los días son grises y tristes. Y por si fuera poco, después de las fiestas llega la temible cuesta. Está claro que enero no es el mejor mes del año precisamente… Es más, lo normal es sentirse un poco tristes al pensar que hay que afrontar todo este mes.
Pero: ¿Sabías que en enero se encuentra el que está considerado como el día más triste del año? El llamado «Blue Monday» o «Lunes triste» que, como su nombre indica, se celebra un lunes. El tercer lunes de enero, para ser más concretos.
Blue Monday: El día más triste del año
Que el día más deprimente del año sea en enero no es casualidad:
- Las navidades ya se han terminado, y la euforia de fiestas y regalos ya está algo lejos.
- Los propósitos de año nuevo que no se hayan empezado a cumplir para esta fecha, ya no se cumplirán.
- El invierno ya ha mostrado lo peor de sí.
- La desgastada economía después de las fiestas aun no se ha recuperado, y aun quedan varios días para recibir la nómina.
Y por si todo esto no fuera suficiente, además, es lunes.
La fecha no se ha elegido al azar, de hecho, detrás de su descubrimiento está un exhaustivo estudio elaborado por un psicólogo de la Universidad de Cambridge que dio como resultado una fórmula, tan compleja como completa, y que tiene en cuenta todos los factores anteriores.
Aunque hay que decir que hasta del día más triste del año se pueden sacar cosas buenas y es que, el origen del estudio que dio como resultado el Blue Monday, fue una campaña de una agencia de viajes que buscaba promocionar la mejor época para viajar.
Si en sus orígenes fue una agencia de viajes la que puso una sonrisa en el día más triste del año, ahora la fecha es de sobra conocida, y una de las fechas más esperadas del año debido a las ofertas, promociones y descuentos que se pueden encontrar. Y por cierto, este año, el Lunes Triste se celebra el 21 de enero de 2019.
Que sí, que el Blue Monday será el día más triste del año, pero seguro que es un poco más llevadero si ese regalo que los Reyes Magos no trajeron lo encontramos en una promoción irresistible, ¿no te parece?